La muerte de César Elorduy Bilbao tiñó de luto la Behobia-San Sebastián. El corredor de Sondika falleció a 300 metros de la meta, antes del puente del Kursaal, tras padecer una parada cardíaca.
El atleta vizcaino sufrió un desfallecimiento por parada cardiorrespiratoria y fue atendido inmediatamente por los servicios sanitarios de la Cruz Roja, que le trasladaron hasta el hospital de campaña situado en la calle Garibay, junto a la llegada de la prueba. Durante 48 minutos, los médicos intentaron reanimarlo en una ambulancia, pero no tuvieron éxito y el corredor falleció a las 14.15 horas, sin llegar siquiera a ser hospitalizado.
Tras su defunción, el cuerpo del corredor fue llevado directamente al Instituto Anatómico Forense.
UN CORREDOR HABITUAL César estaba a punto de concluir su sexta participación en esta carrera en el momento de su fallecimiento. Desde 2005 no se había perdido ninguna edición de la Behobia. El año de su debut rozó las dos horas para completar el recorrido, en 2006 y 2007 mejoró sus tiempos anteriores y en 2008 paró el cronómetro en una hora y 54 minutos.
El año pasado, a pesar del mal tiempo, obtuvo su mejor registro en esta prueba, con una marca de una hora y 44 minutos. Al parecer, el difunto no estaba adscrito a ningún club, pero sí corría habitualmente, y había participado en pruebas como la Desde Santurce a Bilbao, e incluso en carreras de montaña como la Roncesvalles-Zubiri.
PRECEDENTES No es la primera vez que hay que lamentar una defunción entre los participantes de la Behobia. La última vez que la tragedia arruinó la fiesta del atletismo popular había sido en 2002, cuando el irundarra Asier Torrente, de 23 años, falleció tras sufrir un paro cardiaco a pocos metros de la meta.
Torrente, que jugaba al fútbol en las filas del primer equipo del Hondarribia, llegó a ser trasladado al servicio de Urgencias del Hospital de Donostia, donde ingresó en estado de coma para acabar falleciendo a las seis de la tarde.
PÉSAME DEL FORTUNA El Club Deportivo Fortuna, organizador de la Behobia-San Sebastián, emitió un comunicado a través de su página web para informar "del lamentable fallecimiento de uno de los participantes de la presente edición". La entidad donostiarra quiso "transmitir el pésame a la familia" del atleta fallecido y su "compromiso de atenderles en lo posible en estos duros momentos". Goian bego.
DE NUEVO RAFA El salmantino cubrió la distancia en 1h01:12 y volvió a superar a Chema Martínez, tras un magnífico duelo que no se rompió hasta el alto de Miracruz. El alavés Gontzal Sanz, soberbio, completó el podio.
La donostiarra, que realizó una marca de 1h15:10, logró el primer triunfo guipuzcoano desde Iratxe Aranburu en 2003. La atleta de Gros, cuarta en 2009, se benefició del garrafal despiste sufrido en la salida por la delegación etíope, cuyos atletas salieron con 44 minutos de retraso, para batir con cierta holgura a la madrileña Pilar Fernández y a la ilerdense Meritxell Bonet.
Finalmente, 17.437 de los 20.504 atletas inscritos tomaron la salida, de los que sólo sesenta no llegaron a meta.
Sin récord El estrecho marcaje entre Rafa Iglesias y Chema Martínez, además del viento contrario que sopló en diferentes momentos de una prueba pasada por agua en su segunda parte, desbarató la posibilidad de batir la marca fijada por Alberto Juzdado en 1996 (59:19).
Rafa y Chema impusieron pronto su condición de únicos favoritos con un parcial de 15:09 en el primer cincomil –a 3:02 pelados por kilómetro–, mientras que el bravo Gontzal Sanz permanecía a apenas nueve segundos. En Gaintxurizketa, los dos atletas internacionales comprobaron que las fuerzas estaban igualadas, por lo que comenzaron a pensar más en el triunfo que en el cronómetro.
En el kilómetro 10 (31:23), Sanz seguía a nueve segundos del dúo de estrellas, con los que llegaría a contactar al inicio del siempre interminable Puerto de Pasajes. Por detrás se iban ampliando las desventajas y, a mitad de carrera (en Lezo), Luis del Águila, cuarto, pasaba a más de 40 segundos y Jon Arozena –que acabaría quinto y mejor guipuzcoano–, era séptimo a más de un minuto.
A partir de ahí, Rafa trató de tensar a Chema, consciente de la mayor velocidad del madrileño en los últimos metros. Así, en el tramo portuario, el salmantino cambió de ritmo y descolgó al gasteiztarra. El subcampeón de Europa de maratón claudicó en la zona de Bidebieta, poco antes de desembocar en el alto de Miracruz, por cuya cima Iglesias ya lo aventajaba en una decena de segundos que se convirtieron en 50 en la meta, donde, a dos semanas del maratón donostiarra, Rafa impuso un mejor momento que Chema, que correrá el maratón de Castellón el próximo día 12 de diciembre.
Bilbao Press
